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Un saldo de 50 muertos, entre ellos cinco niños, dejó el ataque ruso a una estación de tren ucraniana de Kramatorsk.
Redacción Grupo Cantón
Al menos 50 muertos, incluidos cinco niños, dejó el ataque contra la estación de tren ucraniana de Kramatorsk, en el este de Ucrania.
Según autoridades locales, miles de personas se habían concentrado ahí en espera de su evacuación.
Pavlo Kirilenko, gobernador de Donetsk, dijo que el número de heridos ingresados en hospitales se eleva a 98, muchos de ellos de gravedad.
El funcionario responsabilizó a “los fascistas rusos” de haber dirigido su ataque con misiles “Tochka-U” en una acción premeditada contra la población civil.
De hecho las autoridades ucranianas llevaban dos días apremiando a la población civil para abandonar esas regiones ante posibles ataques de las tropas rusas.
Oleksiy Arestovych, asesor del jefe de la Oficina de la Presidencia ucraniana, dijo: “Las tropas rusas atacaron con un misil del tipo Iskander la estación de trenes de Kramatorsk. Hay que comprender que ataques de este tipo van precedidos de un reconocimiento minucioso del objetivo, como mínimo con drones, observando el terreno”.
Por su parte Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, aseguró en una declaración a través de su cuenta en Facebook que este ataque contra una estación de trenes es la prueba de que Rusia “extermina” a la población civil.
