Visitas
Ante la temporada de calor y sequía, se buscará coordinar procedimientos y acciones ante las quemas, muchas de las cuales son intencionales
Redacción Grupo Cantón
La temporada de sequía aumenta el riesgo de incendios en el país, por esta razón, el Partido Verde (PVEM) en la Cámara de Diputados, solicitó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y a las dependencias homólogas en los estados, a que coordinen, con tiempo, los procedimientos y acciones preventivas y de contención de incendios forestales, muchos de ellos, provocados con fines de lucro.
Mediante un Punto de Acuerdo, la bancada verde pidió a los tres órdenes de gobierno, prevean los recursos humanos, materiales y financieros requeridos para reducir riesgos, desastres y atención de emergencias.
Demandó un plan de contingencia que funcione para fortalecer las capacidades y habilidades del personal que trabaja en tareas de auxilio, con el objetivo de evaluar, en tiempo real, el peligro de incendios, a fin de proteger vidas humanas, recursos naturales, patrimonio de las familias, cuidar la calidad del aire y reducir las emisiones de partículas contaminantes.
Los legisladores ecologistas recordaron que ser omisos en materia ambiental, representa un costo elevado. Tan sólo en cinco años, de 2005 a 2010, México perdió en promedio anual, 160 mil hectáreas de zonas boscosas.
“Hay que detener la pérdida de nuestras reservas, revertir el daño causado y sancionar y erradicar los incendios forestales intencionales, que generan la quema voraz e insaciable de grandes extensiones de bosque para, posteriormente, asentar en ese lugar huertos particulares o construir condominios”, planteó el Punto de Acuerdo.
Agregó, para muestra tenemos estados como Michoacán, Jalisco o Guerrero, donde en complicidad con las autoridades, se cambia el tipo de suelo, para asentar las huertas aguacateras, el llamado oro verde o bien, sembrar droga, un procedimiento depredador de la delincuencia organizada.
Provocar incendios, insisten los legisladores, trae consecuencias graves e irreversibles al ambiente, acelera el cambio climático por el aumento de la temperatura global y además, apresura la escasez de agua, la crisis alimentaria, un aumento en la desnutrición, la pobreza, más enfermedades, la extinción de flora y fauna y nuevos desastres naturales, producto de las sequías e inundaciones.