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Ricardo Rubio Torres
El pasado viernes 1 de octubre, rindieron protesta los 16 Alcaldes de la Ciudad de México, quienes ejercerán funciones por los próximos tres años. Cabe resaltar que seis fueron reelectos: Benito Juárez, Cuajimalpa, Iztacalco, Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Xochimilco.
Desafortunadamente, la toma de protesta se caracterizó por diversas fricciones, la ausencia de la Jefa de Gobierno, reclamos por parte de la oposición, elogios para el partido en el poder y algunos destapes, así como algunas groserías como la de Armando Quintero quien lanzo senda perorata al Diputado Christian Von mientras este pronunciaba su discurso en nombre del Grupo Parlamentario del PAN en el Congreso de la Capital.
De las 16 Alcaldías, nueve serán administradas por la oposición que conforma el PRI, PAN y PRD. Confiamos en que el PRI capitalino cumpla y se sostenga la alianza, pues ha dado visos y señales contradictorias, esperemos que esto se trate solo de una equivocada percepción.
Lo que también esperamos, es que la Jefatura de Gobierno de la CDMX, deje de un lado las diferencias partidistas y le permita a los nuevos Alcaldes realizar su trabajo sin aventurarse a una “cacería de brujas” ni ser “piedra en el zapato”, como es el caso del Alcalde de Coyoacán, quien a pesar de haber ganado con el 53. 34% de la votación (170 mil votos) y trabajar con los vecinos de su Alcaldía (inclusive semanas antes de su toma de protesta), los concejales de Morena guiados por el odio y sin pruebas sólidas más allá que la vulgar especulación y la línea de su partido, lo denunciaron por una falsaria y estulta acusación ante la Fiscalía de la CDMX.
Ojalá que los capitalinos tengamos de una vez por todas los gobiernos que nos merecemos, sin tintes partidistas.
