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Fabian Pasos
Hace unos minutos terminé cuatro entrevistas con diversos trabajadores del Sector Salud Público en específico profesionales que laboran dentro del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias mejor conocido como INER y todos coinciden en asegurar que el Sector Salud Público está regresando al panorama que vivimos hace unos meses.
Diversas enfermeras, doctores y más se encuentran al borde de la desesperación al no poder controlar los contagios que existen por SARS COV 2 en la capital del país gracias a la irresponsabilidad de muchos ciudadanos que prefieren salir sin cubrebocas a la calle y relajaron sus medidas sanitarias a pesar de estar conscientes que esto no desaparecerá por más que apliquen millones de vacunas.
Me pareció sumamente interesante darme cuenta que el riesgo de muerte por SARS COV 2 radica principalmente en no atenderse de manera inmediata. Todos los doctores y enfermeras que entrevisté aseguran que muchas de las personas que llegan a los hospitales se atendieron en casa pero lamentablemente no todos tienen los mismos síntomas.
Es interesante darme cuenta que to- dos coinciden con la falta de apoyo del Gobierno Federal en instituciones tan importantes como el INER donde la falta de respitadores artificiales o camas sobrepasó los límites del hospital y diversos pacientes con otro tipo de enfermedades se quedan en espera de ser atendidos debido a que el COVID, es prioridad.
Es cruel escuchar de viva voz las historias que pasan dentro del hospital; pacientes que ruegan ser desconectados debido a la desesperación por no poder respirar, muchos otros viven con el temor de no regresar del coma inducido para colocarles respiradores artificiales y más… las historias son impactantes.
El Sector Salud está perdiendo también elementos valiosos durante esta batalla contra el SARS COV 2 y por lo menos todos mis entrevistados aseguran conocer a más de una persona que labora en el Sector Salud Público que ha perdido la batalla contra el COVID dando todo su conocimiento para erradicarlo en la población de la Ciudad de México.
Mientras estás leyendo esta columna diversas familias siguen buscando un espacio para ser atendidas de manera gratuita por algún hospital.
