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Rodolfo Mondragón
-Lupita, a pesar de que en la Ciudad de México, seguimos en Semáforo amarillo, las autoridades educativas ya hacen preparativos para un eventual regreso presencial a clases.
-Qué bueno, Chabelita, ojalá que así sea, porque los niños y jóvenes estudiantes, son sin duda quienes más han padecido los estragos de esta
condenada pandemia.
-No se podía hacer antes, Lupita, por el riesgo de enfermarse, porque el número de contagios era muy alto, ahora ya es mucho menor, no por eso podemos confiarnos.
-Dicen, Chabelita, que si las cosas siguen así, posiblemente los próximos días se reanuden la clase presenciales, sin descuidar las medidas sanitarias que hemos adoptado desde que inició la malvada pandemia.
-Así es Lupita, funcionarios de la oficina de la Autoridad Federal Educativa, de la SEP, junto con directores, maestros y padres de familia, están haciendo labores de mantenimiento, limpieza, como parte de las jornadas de sanitización de los 783 planteles de educación básica de la CDMX.
-Dicen que la decisión de llevar a los niños a clases presenciales es de los padres de familia son ellos Chabelita, quienes deciden si llevan a sus hijos a la escuela o no.
-Tiene razón Lupita, no los pueden obligar a que lleven a sus chamacos a la escuela, porque a los niños y jóvenes todavía no los han vacunado y la pandemia, aunque ha bajado, el riesgo de contagio persiste.
-Sin duda una decisión difícil de tomar Lupita, pero si las autoridades hacen su parte de manera correcta y nosotros como sociedad lo que nos toca, podemo pensar en el regreso a clases presenciales de manera responsable, cuidándonos todos.
