El Coronavirus trajo varios problemas, entre ellos se encuentran los del ámbito deportivo.
Hasta hace poco gozábamos de grandes espectáculos, en estadios para ochenta mil o más espectadores.
Ello al parecer en lo futuro será imposible; ahora es el Covid-19, pero nadie nos asegura que no aparecerán otras epidemias que puedan ser más peligrosas.
No se trata de ser pesimistas, sino que nos guste o no, esas grandes aglomeraciones en centros de espectáculos, no podrán repetirse y ante ello, el ingenio tomará un papel preponderante.
Así será el caso que la tercera dimensión (3D), mejorará sensiblemente y en la sala de nuestra casa estaremos casi tocando a los protagonistas deportivos; es indudable que las reuniones masivas serán cosa del pasado, no solo en eventos deportivos, sino artísticos e infinidad de estos, que por razones de salud no se permitirán.
Por supuesto, las recientes generaciones no tendrán mucho que lamentar, puesto que habrán de acostumbrarse a las nuevas técnicas; quienes tal vez añoren el pasado sean quienes ya en edad adulta tuvieron el privilegio de grandes eventos deportivos, artísticos y de distinta naturaleza.
