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ESTADO DE MÉXICO.- Las distintas etnias de los pueblos originarios de la entidad mexiquense se encuentran en total marginación y olvido del gobierno que encabeza el ejecutivo estatal, Alfredo del Mazo, y por más que algunas comunidades desean organizarse e independizarse y se les reconozca como municipio debido al abandono en que los tienen las autoridades locales y estatales no se les permite ni apoya y prefieren que se mantengan en la pobreza.
El pasado 5 de enero durante el diálogo con pueblos indígenas del Estado de México, que encabezó el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el Gobernador Alfredo Del Mazo Maza señaló que la desigualdad que existe en las comunidades indígenas “es una deuda histórica”, pero a dos años de su administración el priista no ha hecho nada que en verdad les beneficie.
Alfredo del Mazo Maza, dio a conocer que en el estado de México “es el séptimo estado a nivel nacional en población indígena” y reconoció que “una de las deudas que se tiene con este sector de la población se encuentra en materia educativa, ya que el 43 por ciento de la población indígena no terminan su educación primaria”.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) registró que En el Estado de México existe un total de 97 820 hablantes de lengua otomí, que en su mayoría habitan en municipios de Ocoyoacac, Otzolotepec, San Mateo Atenco, Soyaniquilpan de Juárez, Temascalcingo, Temoaya, Tianguistenco, Timilpan, Toluca, Villa del Carbón, Xonacatlán, Zinacantepec Acambay, Aculco, Amanalco, Calimaya, Capulhuac, Chapa de Mota, Huixquilucan, Jilotepec, Jiquipilco, Lerma, Metepec y Morelos.
El ejecutivo mexiquense sabe que en la entidad hay más de 420 mil indígenas, de los cuales, 300 mil pertenecen a los pueblos originarios mexiquenses, mazahuas, matlatzincas, nahuas, otomís y tlahuicas, pero en su programa de gobierno no los incluye, sólo algunos grupos femeninos con su programa del salario rosa.
Mujeres indígenas tienen que salir de sus lugares de origen para vender sus artesanías como muñecas, manteles y tejidos, incluso frutas y verduras por la falta de fuentes de empleo y crecimiento económico en las poblaciones. Las jóvenes, adolescentes y niñas se embarazan a temprana edad e incluso contraen matrimonio porque faltan escuelas y centros de salud para brindar orientación y educación sexual.
PUEBLOS INDÍGENAS BUSCAN INDEPENDENCIA
Mazahuas de San Felipe de la Rosa, buscan independizarse del municipio de Villa Victoria desde el 2016 y se les reconozca como una nueva localidad, toda vez que 52 comunidades en total marginación conforman la presidencia indígena mazahua que busca convertirse en el primer municipio mazahua.
En la actualidad desconocen el gobierno de Mario Santana. Integrante del consejo general de la presidencia indígena coinciden que en reiteradas ocasiones le piden a Alfredo del Mazo y a la legislatura mexiquense se les reconozca su independencia y su erección como municipio con 46 mil habitantes y puedan financiar sus propios servicios públicos con la asignación de recursos estatales y federales, ya que Villa Victoria y el gobierno del estado no les otorga lo necesario ni servicio de salud, pavimentación, agua potable, drenaje, alcantarillado y electrificación.
ESTADO DE MÉXICO.- Las distintas etnias de los pueblos originarios de la entidad mexiquense se encuentran en total marginación y olvido del gobierno que encabeza el ejecutivo estatal, Alfredo del Mazo, y por más que algunas comunidades desean organizarse e independizarse y se les reconozca como municipio debido al abandono en que los tienen las autoridades locales y estatales no se les permite ni apoya y prefieren que se mantengan en la pobreza.
El pasado 5 de enero durante el diálogo con pueblos indígenas del Estado de México, que encabezó el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, el Gobernador Alfredo Del Mazo Maza señaló que la desigualdad que existe en las comunidades indígenas “es una deuda histórica”, pero a dos años de su administración el priista no ha hecho nada que en verdad les beneficie.
Alfredo del Mazo Maza, dio a conocer que en el estado de México “es el séptimo estado a nivel nacional en población indígena” y reconoció que “una de las deudas que se tiene con este sector de la población se encuentra en materia educativa, ya que el 43 por ciento de la población indígena no terminan su educación primaria”.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) registró que En el Estado de México existe un total de 97 820 hablantes de lengua otomí, que en su mayoría habitan en municipios de Ocoyoacac, Otzolotepec, San Mateo Atenco, Soyaniquilpan de Juárez, Temascalcingo, Temoaya, Tianguistenco, Timilpan, Toluca, Villa del Carbón, Xonacatlán, Zinacantepec Acambay, Aculco, Amanalco, Calimaya, Capulhuac, Chapa de Mota, Huixquilucan, Jilotepec, Jiquipilco, Lerma, Metepec y Morelos.
El ejecutivo mexiquense sabe que en la entidad hay más de 420 mil indígenas, de los cuales, 300 mil pertenecen a los pueblos originarios mexiquenses, mazahuas, matlatzincas, nahuas, otomís y tlahuicas, pero en su programa de gobierno no los incluye, sólo algunos grupos femeninos con su programa del salario rosa.
Mujeres indígenas tienen que salir de sus lugares de origen para vender sus artesanías como muñecas, manteles y tejidos, incluso frutas y verduras por la falta de fuentes de empleo y crecimiento económico en las poblaciones. Las jóvenes, adolescentes y niñas se embarazan a temprana edad e incluso contraen matrimonio porque faltan escuelas y centros de salud para brindar orientación y educación sexual.
PUEBLOS INDÍGENAS BUSCAN INDEPENDENCIA
Mazahuas de San Felipe de la Rosa, buscan independizarse del municipio de Villa Victoria desde el 2016 y se les reconozca como una nueva localidad, toda vez que 52 comunidades en total marginación conforman la presidencia indígena mazahua que busca convertirse en el primer municipio mazahua.
En la actualidad desconocen el gobierno de Mario Santana. Integrante del consejo general de la presidencia indígena coinciden que en reiteradas ocasiones le piden a Alfredo del Mazo y a la legislatura mexiquense se les reconozca su independencia y su erección como municipio con 46 mil habitantes y puedan financiar sus propios servicios públicos con la asignación de recursos estatales y federales, ya que Villa Victoria y el gobierno del estado no les otorga lo necesario ni servicio de salud, pavimentación, agua potable, drenaje, alcantarillado y electrificación.
