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Lo que está pasando al interior de los Juzgados de la capirucha es aberrante, pues de nada sirve que la Procu le eche producto de gallina para atrapar a los malandros, si los jueces, valiéndoles máuser las víctimas los dejan libretas.
Menciono esto por el caso de la señito Abril Pérez, a quien dos batos en moto le dieron chicharrón el pasado 25 de noviembre en el cruce de Insurgentes Sur y Río Churubusco.
Se sospecha que el que mandó a darle en la torre fue su ex machín, a quien denunció por tentativa de feminicidio en enero de este año; la Procu chilanga hizo su chamba y detuvo a su exmarido, al que puso con tochas las pruebas a disposición del juez Federico Moscoco, pero ¿qué creen? el disque impartidor de justicia desestimó la acusación y dejó libretas al gandalla. Hoy doña Abril está muerta. Así se las gastan los juececillos de segunda que tenemos y no hay nadie que les ponga un freno o un castigo; sabían que Abril estaba en riesgo y aun así dejaron libre a su acosador. Qué poca…sensibilidad
