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El pasado sábado surgió a la luz pública una nueva propuesta política, Siglo XXI, integrada en su mayoría por viejos conocidos en el PRD, que por excesos a punto estuvo de perder el registro en la última contienda electoral.
Quienes dieron a conocer la propuesta política, le apuestan al olvido ciudadano, creen que cambiando los colores y el nombre de un partido político que lo corrompieron, es suficiente para seguir viviendo del erario público.
En esa nueva propuesta electoral (Siglo XXI), hay verdaderos mercenarios políticos, los que entregaron los ideales del PRD al Gobierno de Enrique Peña Nieto y hoy se rasgan las vestidura pregonando una democracia que no conocen.
Los capitalinos no olvidan a las parejas imperiales, cacicazgos creados en las alcaldías (antes delegaciones) y la prueba la dieron el primero de julio de 2018.
Esos mismos personajes que abusaron de sus funciones, hoy quieren cambiar de camuflaje, pero no para ayudar a los capitalinos, sino para seguir viviendo del erario público.
