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Los tabasqueños han resistido intensas jornadas de calor en los últimos 74 días, con temperaturas a la sombra de 36 a 38 grados y sensaciones de calor arriba de los 42. También han padecido una severa disminución de las lluvias provocada por el fenómeno ‘El Niño’ débil, además de las masas de aire cálido-húmedo que se generan en el Golfo de México, combinadas con las partículas de arena procedentes del desierto del Sahara.
Lo cierto es que los tabasqueños padecerán aún 18 días más de calor. De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), del 21 de junio hasta este 13 de agosto se registraron temperatura elevadas de hasta 39 grados en el estado.
Pero el mayor registro de calor se presentó ayer en Villahermosa con 38 grados, pero con una sensación de 42. En cambio, en el mismo período del año pasado, la temperatura más alta se registró el 10 de agosto con 37 grados y 41 de sensación térmica.
La dependencia señala que las altas temperaturas también están asociadas a la falta de lluvia, pues del 21 de junio hasta ayer hubo un acumulado de 131.6 milímetros, lejos de los 177.6 registrados del mismo período del año pasado. Ésto significa que las precipitaciones disminuyeron en un 25.9 por ciento.
“Estamos teniendo lluvias por debajo de lo pronosticado, a raíz del efecto imparcial del evento climático ‘El Niño’ débil”, explicó Nicolás Mena Ledesma, experto en meteorología.
CANÍCULA INTENSA
El meteorólogo de la Conagua, Gerardo Alarcón Ferreira, abundó que la Canícula de este año es más intensa que la del año pasado, por eso el verano es más caluroso y con menos lluvias.
“Tenemos déficit de lluvia incluso por debajo de lo que se registró en el mismo período del año pasado”.
La falta de lluvia, el registro de temperaturas de hasta 38 grados, además de la humedad presente, han generado que la sensación térmica se eleve hasta cuatro grados más, al formarse el efecto de la evapotranspiración. Por eso se siente más calor de lo habitual, incluso más intenso que los calores de abril.
SACAN ‘ARSENAL’ CONTRA EL CALOR
A raíz de las altas temperaturas los tabasqueños han sacado el ‘arsenal’ pero de hamacas, aguas frescas, parasoles, con el propósito de mitigar las altas temperaturas. Tal es el caso de don Gabriel López Díaz, habitante de la comunidad de la Cruz del Bajío, que colgó su hamaca en dos árboles.
“Cuando siento que no puedo soportar el calor dentro de la casa, lo que hago es sacar mi hamaquita, la amarro de dos árboles, y me acuesto un rato, dijo.
Otras familias que viven en casas de láminas optan por vertir agua en las paredes.