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EN MÉXICO PODRÍA AVECINARSE UNA CRISIS ALIMENTÁRIA POR EL OLIGOPOLIO DE FERTILIZANTES
En varios estados del país, políticos mexicanos se apoderaron de la distribución de fertilizantes. Estos, bajo la bandera de Morena, cobran hasta 300 pesos a campesinos de Guerrero y otras entidades, para entregarles el abono para producir en sus parcelas. Un crimen lacerante.
Esos políticos sin escrúpulos como acaparadores, guardaron el fertilizante y lo usaron para atraer votos en su favor. Un crimen que se queda sin castigo. ¿Nombres? Pues ahí está el delegado de AMLO en la entidad, Amilcar Sandoval, quien ya es un hombre muy rico y busca la gubernatura.
Esto contrasta con los datos duros. El sector de alimentos procesados registra un valor superior a los 111 millones de dólares, además de representar el 23.4% del Producto Interno Bruto manufacturero y 3.9% del PIB total.
Además, México es el segundo proveedor de alimentos procesados a Estados Unidos y se posiciona como el tercer productor en América.
Entre oficinas, plantas manufactureras y centros de distribución, nuestro país posee más de 187 mil unidades económicas distribuidas principalmente en 5 entidades: Estado de México, Puebla, Oaxaca, Veracruz y Ciudad de México. Este tipo de acciones políticas sólo llevan a un sólo lugar: el chantaje para que los políticos, del partido que sean, tengan más poder y dinero, utilizando voluntades como la de los más pobres de los pobres.
