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LOS DARDOS DE BRACHO
CARLOS BRACHO
YO PERTENEZCO AL SINDICATO DE ACTORES DE LOS EEUU, POR ESO…
…escribo esto desde los Ángeles, CA. Quiero decirles que esta no es una ciudad modelo, pero dentro de todo el caos vial que pudieran provocar los 6 millones 479 mil 206 automóviles, y agregue usted, lectora insumisa y pluscuamperfecta, que circulan 1 millón 107, 731 camiones y dentro del Condado viven los 10 millones, 173, 387 habitantes. Un mundo escalofriante.
Hay ordenamientos civiles, legales y viales que marcan los límites a los ciudadanos están obligados a respetar. Hay una cultura del respeto para gozar de la convivencia pacífica.
Los anuncios viales son obedecidos, las reglas para operar tiendas, supermercados, teatros, cines, etc., se cumplen a pies juntillas. Aquí está en chino que puedas “comprar” a un policía, si tratas de hacer esa vileza, terminarás esposado y conducido a la Estación de Policía y el juez aplicará lo que merezca el infractor.
Evidentemente hay robos, pero no llegan a las terribles alturas de los que en México acontecen. Caminar por los parques, pasear por los bosques, viajar por carretera, es correr el riesgo de ser hasta asesinado. Y claro, los maleantes se han adueñado nuestra otrora soberana República mexicana.
Además, en nuestras ciudades hay colonias populares en donde no existe ninguna planeación que permita la sana convivencia. Las bandas criminales dominan, amenazando, explotando negocios grandes y negocios pequeños.
La ley, la Justicia, se aplica con rigor inusitado contra el indígena, la ama de casa, el estudiante, el campesino. Y los Amparos que dan aire y libertad son usados por los criminales de cuello blanco.
Caminé por esta ciudad angelina por varios parques, se respira una tranquilidad que brilla por su ausencia, en nuestro México lindo y querido. VALE
