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A los que no les va a gustar nadita el dictamen de la Reforma Educativa que se aprobó en las comisiones Unidas de Educación y Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, y que posteriormente fue turnada a la Mesa Directiva para ser aprobada en el pleno y enviarla al Senado de la República, es a los integrantes de la CNTE. En esta segunda ronda, se modificó el artículo Décimosexto transitorio, que contempla que el Estado mexicano sea el que tenga el control total de las plazas del magisterio y no el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) o la Coordinadora. Anteriormente, la redacción de este artículo dejaba ver que el SNTE podría controlar el 50 por ciento de estas y la SEP el otro 50. Por su parte, el senador Martí Batres, considera que existen las condiciones para aprobarla, mientras en la lista de espera hay siete temas pendiente para su discusión y aprobación en la cámara Alta, las cuatro leyes secundarias de la Guardia Nacional, la ley reglamentaria en materia de extinción de dominio, así como las reformas sobre trabajadoras del hogar y paridad de género. El Senado espera como pan caliente estas reformas.
