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Por: Alejandro Lelo de Larrea
En la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se reforzó el operativo de seguridad entorno del vuelo en que partió el presidente Andrés Manuel López Obrador a Mazatlán, Sinaloa.
En el filtro de seguridad, a los pasajeros que viajaban a ese destino, los pasaron por la misma banda de rayos x, en la que hubo revisión más exhaustiva, con detectores de metales recorriendo el cuerpo.
También de manera aleatoria se le pidió a los pasajeros abrir sus equipajes para ser revisado el contenido en su totalidad.
En la sala de espera, decenas de personas abordaron al mandatario para tomarse la selfie con él, hacerle recomendaciones, peticiones, felicitaciones.
Al abordar el avión, el equipo de seguridad de la aerolínea Volaris le hizo una fila especial y lo dejó abordar primero. Dejaron pasar unos minutos para que el resto de los pasajeros subiera al avión.
De Mazatlán, López Obrador se trasladará por tierra al norte de Nayarit, para visitar las zonas afectadas por el huracán Wila, en octubre pasado.
A las 14:00 horas el encuentro se llevará a cabo en el Lienzo Charro “Óscar Cosío”, del municipio de Acaponeta.
A las 16:30 horas encabezará oteo encuentro en el Estadio de Béisbol “Lorenzo López Ibáñez”, en el municipio de Tuxpan, ubicado en Álvaro Obregón, Nayarit.
De ahí se trasladará por tierra a Tepic, Nayarit, para de ahí volar de regreso a la Ciudad de México.