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Definitivamente cuando pensamos en Navidad, una de las historias que llegan a nuestra mente es la de El Grinch, el mítico personaje creado por el Dr. Seuss, y más aún si recordamos la icónica cinta del año 2000, protagonizada por Jim Carrey y Taylor Momsen, que aunque no fue muy bien recibida en su momento, no podemos negar que ha logrado trascender en la memoria colectiva como uno de los clásicos para mirar en estas fechas decembrinas.
Ahora, 18 años después, llega una nueva adaptación de El Grinch, en esta ocasión animada por Illumination Entertainment, apelando a la oportunidad de lograr conquistar a nuevas generaciones ávidas de conservar el espíritu navideño. Desafortunadamente la película no cumple las expectativas y se queda en una anécdota más del montón.
75 millones costó su producción
Es una producción que estoy seguro disfrutarán los pequeños del hogar, pues su increíble animación los deslumbrará, ya que cada detalle está cuidado a la perfección, y algunos de los personajes están creados para generar un impacto agradable en los chiquitines, ¡pero hasta ahí!
IDIOMA ORIGINAL
El británico Benedict Cumberbatch da su voz a El Grinch y Cameron Seeley es Cindy Lou.
El problema radica en el pobre desarrollo de su guion y en varios momentos tediosos e innecesarios que se viven a lo largo de su duración, y aunado al hecho de que el doblaje de Eugenio Derbez, como El Grinch, se siente fuera de lugar y no da el tono adecuado. Esta producción se convierte así, en una simple adaptación más del infame personaje que se roba la Navidad.
SINOPSIS
El malvado Grinch, trama un esquema malvado con su perro de confianza Max, para arruinar la Navidad, cuando los residentes de Villa Quien, planean su celebración anual de vacaciones. Mientras, Cindy Lou planea buscar a Santa Claus para agradecerle por ayudar a su madre soltera cada Navidad.
