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La violencia es un ente que en los últimos años ha registrado números alarmantes en México.
Ninguna de las 32 entidades que conforman el país ha estado encenta de estos hechos, que también han llegado al futbol.
Y es que el deporte más popular en México se ha visto empañado por diversos sucesos, mismos que han dejado fuera de los estadios a las familias, que han optado por otras opciones de entretenimiento.
Los culpables o responsables son muchos, es la verdad. Desde los aficionados que bajo los efectos del alcohol, que es otro problema, tienen un comportamiento reprobable, hasta los barristas que provocan incidentes fuera o dentro de las canchas.
Muchos son los casos de barristas, un término que nació en Argentina o ahora es parte de muchos aficionados en México, pero los más recientes apuntan al norte del país.
La rivalidad entre Rayados y Tigres en los últimos años se ha convertido en una guerra en las tribunas. Golpes cobardes y agresiones que han concluido con personas en los hospitales.
La Ciudad de México no se ha quedado atrás, una entidad donde residen tres equipos de convocatoria nacional. América, Pumas y Cruz Azul también han tenido problemas por culpa de sus grupos de animación.
Mencionar cada uno de los casos nos llevaría mucho tiempo, pero sin duda, son episodios que han salido a la luz, gracias a los medios de comunicación y redes sociales.
Ahora la pregunta es ¿hasta cuándo la violencia en el futbol mexicano? un cuestionamiento que es complicado responder, también, por la nula respuesta de las autoridades, y no solamente las policiales o estatales, sino de la Liga MX.
Si usted es aficionado y comparte esta opinión, díganos, ¿qué se puede hacer para evitar la violencia en nuestro bendito futbol?
