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Héctor García/Grupo Cantón
CIUDAD DE MÉXICO.- Agenda privada para los representantes de los medios de información, pero no para sus colaboradores y capitalinos que llegan a la casa de transición de la jefa de Gobierno electa, Claudia Sheinbaum, a solicitar audiencia, a presentar proyectos de trabajo o a solicitar ayuda de programas sociales.
En el transcurso del lunes, a la casa de transición llegaron Luz Elena González, próxima secretaria de finanzas, Estela Damián, quien será titular del DIF y Rosa Icela Rodríguez, secretaria local de Gobierno.
Las tres acudieron para informarle a la doctora Claudia Sheinbaum cómo van los procesos de transición, a escasos dos meses de que inicie el Gobierno de la innovación y la esperanza.
La doctora Sheinbaum no acudió al Congreso de la CDMX a la toma de protesta de 11 alcaldes de Morena, sin embargo, no perdió detalle del gran acontecimiento, porque con anterioridad había acordado con sus compañeros de partido y de Gobierno que enviaría a quienes van a ser sus colaboradores como representantes a la toma de protesta en sus respectivas alcaldías.
La atención ciudadana en la casa de transición solo se vio interrumpida cuando sonó al mediodía la alarma sísmica. Varias personas al igual que de la casa vecina salieron a preguntar siestaba temblando, no estaban enterados que el primer lunes de cada mes, las autoridades capitalinas de protección civil activan la prueba de sonido de la alerta sísmica para detectar cuántos altavoces fallaron.
A la casa de transición llegó Eleazar Ramírez, apoderado de Manuel Guerrero, despedido hace 15 años injustificadamente por autoridades de la entoces Setravi, hoy Semovi, para entregar el expediente donde su representado ganó el caso ante la SCJN, pero que el Gobierno capitalino se negó acatar, por lo que le puede estallar la bomba a la nueva administración que entrará en funciones el 5 de diciembre.
