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Los lunes obligatoriamente son de más trabajo para la doctora Claudia Sheinbuam y su equipo de colaboradores.
Desde temprana hora, capitalinos con diferentes problemas están en la casa de transición haciendo antesala para tratar de entrevistarse con ella y plantearle sus necesidades.
Este lunes fue más significativo porque había más personas -la mayoría de la tercera edad-.
La jefa de Gobierno electa, les comentó que sus colaboradores recibirán sus demandas para evaluarlas y tratar de ayudarlos.
Los ojos de la esperanza no se desaniman y hasta se atreven a acercarse y buscar la manera de tomarse una foto. Les da confianza que la próxima gobernante de la ciudad no la acompañe ningún cuerpo de seguridad.
A media cuadra se oye el bullicio de gente que cada lunes acude al mercado sobre ruedas para surtirse o calmar su hambre con antojitos. El tianguis provoca doble fila de automovilistas.
Mientras tanto, adentro de la casa de transición empieza a desahogar su agenda de trabajo. Sheimbaum y el rector de UAM, Eduardo Peñaloza Castro, acuerdan tareas conjuntas para realizar un estudio sobre presupuesto para incrementar la matrícula en las cinco unidades de la UAM y qué carreras impulsar además de las ya tradicionales.
Tras la reunión, Claudia anuncia su rechazo tajante a estar detrás de los actos de violencia generados por porros en contra de estudiantes y se dice respetuosa de las decisiones que tomen los universitarios para garantizar seguridad, buen ambiente dentro del campus y la permanencia o no del Rector Graue.
Se dice dispuesta a trabajar con las autoridades de la UNAM, cuando asuma la jefatura de Gobierno en materia de brindar seguridad en los alrededores de las escuelas respetando en todo momento su autonomía.
Dejó en claro que la PGR y la PGJ, deberán realizar trabajos coordinados para deslindar responsabilidades por las agresiones sufridas por estudiantes de parte de porros, “que a todas luces se percibe que fueron auspiciados”.
