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El uso cotidiano del internet ha moldeado nuestras actitudes en diferentes aspectos. Uno en específico, resulta en el quehacer periodístico, incluso en los medios que todavía se imprimen durante los primeros 20 años del siglo XXI.
En los portales web, la situación se convierte para los redactores, editores y reporteros, en un momento de respiro, pero con una profunda presión, al no poder hacer más que platicar que no hay red y esperar a que el ingeniero en sistemas se ocupe del problema en la materia.
Pero esto queda imposibilitado, cuando las capacidades del ingeniero son rebasadas, en el momento en que la red de determinada empresa, como Teléfonos de México (Telmex) y su Infinutum del magnate Carlos Slim, presenta una falla masiva en al menos 9 nueve entidades federativas, como se apreció durante los primeros momentos de la caída en la página Down Detector.
Ciudad de México, Puebla, Nuevo León, Jalisco, Yucatán, Querétaro, Baja California, Sinaloa y Chiapas, habrían sido afectados.
“Hay una intermitencia o falla en su zona (…) no es necesario de reportarlo, gracias”, es lo que contestaba la grabadora de la empresa, al intentar reportar la carencia de la red.
Después de 3 horas de los primeros reportes en redes sociales, la empresa aseguró que: “en algunas zonas del país existe intermitencia en el servicio de Internet, debido a un corte de fibra óptica”.
Después de las 5 de la tarde, Telmex dio a conocer que el corte de fibra óptica resultó de una quema de pastizales en San Luis Potosí y Sinaloa…
Es la primera con afectaciones mayores
Aunque el 22 de junio del año pasado ya se habían reportado fallas en la red, a causa del robo de cable de cobre y daños en la fibra óptica, la ocurrida el día de hoy tuvo afectaciones mayores.
El año pasado Telmex detectó estas actividades ilegales en Mayorazgo, Puebla, entidad donde se afectaron los servicios de telefonía e internet, en mayor medida, en la zona sur de esta ciudad.
Pero esta ocasión, las afectaciones alcanzaron a, al menos, 9 entidades. Y al anunciar que se restablecerá en mínimo una hora, los periodistas de más de una redacción empezaron a redactar y editar como si no hubiera ocurrido la falla masiva, como yo, al final de esta nota.
