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Ciudad de México.– Poco más de cuatro años después, el sueño del C.P. Alfredo Harp Helú, dueño del equipo de beisbol Diablos Rojos del México, se hace realidad con la apertura del estadio que llevará su nombre.
Fue en diciembre de 2014, cuando el empresario y filántropo oaxaqueño anunció en compañía del entonces Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, la construcción de un inmueble para su novena, exclusivo para la práctica del juego de pelota.
Esta noche, junto al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, encargado de lanzar la primera bola, y de la actual Jefa de Gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, Harp Helú presentará en sociedad el nuevo infierno de La Pandilla Escarlata.
“Es un estadio que combina la parte prehispánica, porque tiene seis pirámides en su exterior, así como cuestiones modernas, porque tiene un techo en forma de trinche que será espectacular, tendrá luz propia y hará que el estadio luzca no sólo para los que estén ahí, sino incluso también, para que desde los aires, la gente que vaya llegando a la Ciudad de México en avión, verá ese trinche iluminado. Será algo espectacular”, aseguró Othón Díaz, presidente ejecutivo de Los Pingos, quien añadió que miembros de la Major League Baseball (MLB), que ya visitaron el escenario, lo calificaron “como el mejor estadio fuera de los Estados Unidos”.
Diseñado por el arquitecto Francisco González Pulido en sociedad con Alonso de Garay, y con el sello de dos artistas mexicanos como Sergio Hernández y Francisco Toledo, el novedoso Trinche del Diablo abrirá sus puertas por primera vez al público, que atestiguará el duelo entre Diablos Rojos y los mejores prospectos de los Padres de San Diego, esta noche en punto de las 19:00 horas cuando se escuche por primer vez el Playball.
